
Las escobas que son de nailon, se ensucian con suma facilidad. Si quieres mantenerla limpia y que cumpla su cometido a la perfección, debes lavarla cada 15 días con un detergente antigrasa y dejarla secar en un lugar donde le dé bien el aire.
Las escobas que son de nailon, se ensucian con suma facilidad. Si quieres mantenerla limpia y que cumpla su cometido a la perfección, debes lavarla cada 15 días con un detergente antigrasa y dejarla secar en un lugar donde le dé bien el aire.
Frota con gasolina hasta disolver la mancha por completo. Luego, lava la prenda con agua y detergente
El detergente líquido que se usa para la vajilla resulta un quitamanchas eficaz. Si se te ha caído algo de fruta en la ropa, echa unas gotas encima de la mancha, frota para que el líquido la empape bien y lávala. Te sorprenderá el resultado.
Después de cada uso del traje de baño, lávalo con agua fría y detergente suave. Aclara, deja en remojo cinco minutos y escurre sin retorcer. No olvides colgarlo a la sombra.
Para limpiar las juntas de los azulejos de gres que se ponen tan feas -sobre todo en la cocina por efecto de la grasa- no tienes más que frotar con un cepillo de dientes viejo mojándolo en un poco de detergente líquido con unas gotas de lejía.
Para eliminar las manchas de grasa que quedan de tanto pasar los dedos por ellos, frota con un paño ligeramente humedecido en agua y detergente. Este mismo truco te servirá para quitar las manchas que quedan en la pared alrededor de los enchufes e interruptores si la pintura es lavable; si ésta no se puede mojar, frota sencillamente con miga de pan o goma de borrar.
¿No sabes cómo limpiar los juguetes de plástico de los niños que acumulan bastante suciedad? No te preocupes porque es muy sencillo: lávalos con agua caliente con un poquito de detergente y unas gotitas de amoníaco. Acláralos muy bien y sécalos. Estarán listos para que reanuden sus juegos.
¿Estás bebiendo cerveza y te cae un poco? Si es reciente, lava con tu detergente habitual frotando un poco (depende del tejido) y aclara. Pero si ya lleva un tiempo seca, cepilla con una mezcla de alcohol y agua. Saldrá fácilmente.
Cuando se tiene una piedra preciosa en casa, no basta con poner una caja fuerte para protegerla; también hay que tener una serie de cuidados para conservarla adecuadamente y que nos dure mucho más tiempo. Por ejemplo, si tienes ágatas, debes limpiarlas con agua caliente, amoníaco y detergente. Luego aclara bien con agua, déjalas secar y, finalmente, frótalas con alcohol de quemar. Si lo que tienes es ámbar, ten presente que recuperará su brillo si te frotas las manos con aceite y luego las pasas por la piedra. Después, para eliminar los restos de grasa, pule con una gamuza.