Si en tu jardín hay caracoles que malogran tus plantas y quieres eliminarlos sin tener que usar ningún pesticida, esparce sobre las plantas gravilla de piedra. La gravilla impide andar bien a los caracoles que prefieren suelos lisos y húmedos y las piedrecillas se pegan a su cuerpo, por lo que evitan caminar por esas zonas. Así los ahuyentarás de manera natural.