
El único secreto para tu ciclamen siga dando flores cuando lo lleves a casa , una vez florecido, y hasta que llegue la primavera es no asfixiarlo de calor: instálalo en un lugar donde la temperatura alcance entre los 7 y 15 ºC. Tampoco lo trasplantes porque crece mejor en macetas pequeñas y riégalo siempre por inmersión para que el tuberobulbo no se moje.