
En numerosas ocasiones, siempre que sea de buena calidad, la cinta adhesiva de doble cara puede sustituir a clavos y tornillos. Sirve para fijar y para colgar multitud de pequeños objetos sin necesidad de llenar de agujeros las paredes.
Los objetos que cuelgues tienen que tener un peso máximo, porque de lo contrario la gravedad te jugará malas pasadas.